Dijeron que no
existía, que era de locos creer en ella.
Que el amor era una cuestión de química, de hormonas, que el
sentimiento en sí, no existía.
Consiguieron descubrir vacunas, avances médicos, tecnológicos. Y dijeron que somos únicos, que somos una obra
de arte cada uno de nosotros, cada ser vivo.
Ahhh, sí – pensé yo -
¡que magníficos somos! Desde
Lascaux o Altamira, hasta la Capilla Sixtina.
Las pirámides, Nazca o la Gran Muralla.
Desde las Venus de marfil o piedra talladas con sílex, hasta El
Dorífero, La Pietá o Las Puertas del Infierno.
Árboles huecos golpeados con una piedra,
tambores de pieles tensadas, pies golpeando el suelo, sinfonías, un violonchelo, un piano….
Delicadas gotas de lluvia imitadas por cuerdas tensadas acariciadas con maestría por manos dirigidas
por una mente luminosa. Por mentes luminosas todo ello.
Dicen que no existe la magia, pero….
Al final, ellos han
descubierto que…posiblemente, todos procedamos de los núcleos de algunas estrellas cuando se convierten en pura energía. En los
elementos que los componen.
Dicen que la magia no existe, pero….. En el fondo…. Somos polvo de estrellas ...........
Pura magia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario